El Ministro detalló como gran política agrícola la ética productiva “no es sólo la necesidad de producir alimentos de manera honesta para el consumo, sino producir dignidad, crear el hombre nuevo y la sociedad justa, productiva, de insumo para la vida, transversal y ecológicamente viable y sostenible en el tiempo”
(Miranda, 19-04- 2016/ Prensa MinPPAPT).- El reto del Plan Agrícola 2016 no sólo es transformar el modelo rentístico petrolero, sino construir un modelo distinto en socialismo, informó el ministro del Poder Popular para la Agricultura Productiva y Tierras (MinPPAPT), Wilmar Castro Soteldo.
Durante su participación en el curso de formación en la Escuela Comandante “Hugo Chávez” del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), Castro Soteldo, aseguró que el Plan Productivo Agrícola se plantea como primer objetivo, tratar de romper el cerco de la dependencia tecnológica y cultural, para no depender de trasnacionales.
Dijo que la dependencia se rompe, primero, formándose con conciencia y luego con el estudio, para producir y rescatar la producción de semillas de buena calidad que se han producido en el país. “Muchos científicos se han ido, se los han llevado las trasnacionales”.
En cuanto a lo cultural, el titular de la cartera agrícola acotó que se debe rescatar los hábitos alimenticios tradicionales, sanos, ricos en proteínas, sin agroquímicos, sin cosas importadas y que, además, se producen en el país.
Como segundo objetivo estratégico señaló lo que tiene que ver con la satisfacción de las necesidades locales, regionales y nacionales, así como generar excedentes en rubros estratégicos para la exportación. Explicó que el requerimiento promedio de los venezolanos es de 27,8 millones de toneladas de alimentos diarios, y que se deben alcanzar con escaza agua, por los efectos climáticos.
El ministro, habló del impacto climático que se ve reflejado en la producción agrícola en entidades como Guárico, Monagas y el sur de Anzoátegui, “que tienen años que no les llueve, y el caso del estado Bolívar que tiene 2,4 millones de hectáreas cultivables para forraje y para ganadería con alta densidad y rendimiento para alimentos, y su población en la mayoría se dedican a la actividad minera por falta de incentivos y de la bravura del impacto climático en la zona”.
Especificó que el plan propuesto contempla un promedio de producción de 18,6 millones de toneladas de alimentos vegetales y 6,2 millones de toneladas de alimentos de origen animal, en una superficie de 2,8 millones de hectáreas, más unas 800 mil hectáreas de pasto y forraje para el ganado. (Fin/O.S)